sábado, 22 de diciembre de 2012

Es el fin del mundo, tal y como lo conocemos




Malos días para los apresurados, peores para los viajeros extraviados. Por suerte para ellos, los organizadores parece que ahora devuelven el monto de las entradas en primera fila en el Uritorco o las superpullman de Chichén Itza. También afirman que pueden retenerlas hasta que finalmente se realice el espectáculo. No aclaran que sería dentro de varios miles de millones de años, con un sol exhausto y en inevitable agonía. De no ocurrir nada terrenal en el medio, entonces finalmente el fin del mundo será así tal y como lo conocemos. A pesar de eso, estamos bien.